Tu bebé ha nacido durante la crisis del Coronavirus, pero no estás sol@

En circunstancias normales el nacimiento de un hijo hace que la vida cotidiana de los nuevos padres dé un vuelco, un giro de 180 grados. Las miles de dudas que surgen, los miedos, los cambios, la deprivación de sueño…son motivos suficientes como para estresar hasta al más tranquilo.

Y resulta que tu bebé ha llegado en el mismo momento en el que una crisis sanitaria amenaza a todo el país y a buena parte del resto del planeta.

Qué agobio, ¿no?

Es comprensible, pero tienes que saber que no estás sol@. Los pediatras no nos hemos olvidado de vosotros. Vamos a ver si os podemos echar una mano con algunas de las muchas preguntas que os surgirán estos días:

Ya llevamos unos días en casa con el bebé, ¿pido cita para la primera revisión con el pediatra o no debería?

Esa primera revisión con tu pediatra es importante, pero quieres evitar el riesgo que supone acudir a un centro médico. ¿Qué hacer? En primer lugar, contacta por teléfono. En muchos centros ya tenemos la opción de solicitar cita telefónica para hablar directamente con tu pediatra. Cada lugar se está organizando de una forma, y es probable que se haya habilitado una zona “limpia” para los niños sanos (separada del resto de pacientes), o un horario de atención especial.

Como normas generales, cuando sea el momento de llevar a tu bebé a la consulta, ten en cuenta que debe acudir solamente UN cuidador, y que esa persona debe estar sana, sin haber presentado fiebre ni síntomas de catarro en las dos semanas anteriores a la visita.

Estoy dando el pecho y empiezo a tener síntomas de catarro…

Si te encuentras bien y quieres darle el pecho a tu bebé, puedes.

A día de hoy, no se ha documentado el paso del virus a la leche materna. Claro que el contacto estrecho con tu bebé podría facilitar su contagio, pero dado que la infección en los niños cursa de forma leve, y teniendo en cuenta los muchos beneficios de la lactancia materna (incluyendo el paso de defensas de la madre al bebé), cada vez más sociedades y plataformas pediátricas están recomendando el mantenimiento de la lactancia materna. Incluso si la madre tiene infección confirmada por coronavirus, si quiere y está en condiciones de dar el pecho, puede. Puedes consultar los comunicados al respecto que han emitido la SEN (Sociedad Española de Neonatología), la IHAN (Iniciativa para la Humanización de la Asistencia al Nacimiento y la Lactancia), la plataforma e-lactancia.org, etc.

Si tienes síntomas, sí que se deben tener ciertas precauciones (no sólo a la hora de dar el pecho), que incluyen el lavado de manos antes y después de acercarse al niño, y el uso de mascarilla. También se puede extraer la leche con sacaleches (guardando las mismas precauciones) para que un cuidador sano se la dé al bebé.

Dentro de poco nos tocan las primeras vacunas y no sabemos qué hacer

De nuevo, contacta primero con tu centro por teléfono para averiguar cuándo y cómo puedes acudir de la forma más segura. Aunque puede haber variaciones en el manejo entre diferentes centros, en general podemos decir que las vacunas del primer año de vida son las más importantes en este momento. A partir del año de vida, la mayoría de las vacunas son “recuerdos”; se administran para reforzar la inmunidad, y por tanto ahora mismo pueden esperar.

Las redes son un bombardeo de información…

Estos días circula mucha información en las redes, a veces con recomendaciones contradictorias. Contrasta todo lo que leas dirigiéndote a las fuentes oficiales… ¡incluido este texto!

Ten en cuenta también que las recomendaciones pueden ir cambiando con el paso de los días, así que comprueba que la información que recibes es reciente, además de provenir de una fuente fiable.

¿Cuándo me tengo que preocupar?

La mayoría de los problemas y dudas que vayan surgiendo estos primeros días en relación a tu recién nacido los podrá resolver tu pediatra con una llamada telefónica, y lo mismo podemos decir para los niños más mayores. Pero hay una serie de síntomas por los que sí tenéis que buscar atención médica de forma presencial. Estos son algunos de los más importantes:

  • Bebé menor de 3 meses con fiebre mayor de 38ºC.
  • Convulsiones (que no escalofríos).
  • Dificultad para respirar: niño que respira muy rápido, se le marcan las costillas al respirar, tiene mal aspecto e incluso coloración amoratada de los labios.
  • Vómitos repetidos y pertinaces que impiden al niño tolerar líquidos.
  • Orina muy escasa o nula (generalmente va asociado a diarreas o vómitos muy intensos)
  • Aparición de manchas rojas/violetas en la piel, que no se aclaran momentáneamente al ser presionadas.
  • En el bebé: irritabilidad extrema. Llora sin parar, no se calma en brazos. Si tu bebé tiene diagnóstico de cólicos y los síntomas son los de siempre y a la hora habitual, no hace falta que vayas a urgencias.
  • En el bebé y en el niño más mayor: decaimiento extremo, que persiste cuando le baja la fiebre. No quiere jugar, tiene mal aspecto.

 

¡Mucho ánimo papás! Lo estáis haciendo muy bien.

Dra. María Mínguez Muñoz

Servicio de Pediatría

Hospital Quironsalud Torrevieja